La propietaria. Emma Reddington, se enamoró de esta casa victoriana del año 1905 situada en Toronto. En la reforma, tuvo claro que quería aprovechar las posibilidades que ofrecían los techos altos y mantener las puertas y ventanas de madera originales, así como la chimenea. En el baño también se ha mantenido la estilo vicoriano. ¿El resultado? sencillamente genial.
The owner, Emma Reddington, fell in love with this Victorian house from the year 1905 in Toronto. Redecoreting the house, she had clear that wanted to take advantage of the possibilities offered by the high ceilings and maintaine original wood windows and doors, and also the fireplace. In the bathroom has remained the victorian style. The result? simply great.
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